Liliana Cadavid
Liliana Cadavid Sanmiguel (Bogotá, 20 de septiembre de 1960-23 de junio de 2006). Poeta, narradora y pintora colombiana. En vida fueron publicados sus libros: de literatura infantil Risas y Sueños (1980) y Sombras de Pan y Alba (1987); de poesía Desviación y ensueño (1985), De la nostalgia para atrás (1987), Saciándome (1988) y Antología poética (2004). Sus últimas producciones literarias en la categoría infantil, El gran libro de los experimentos, El gran libro de los valores y El gran libro del cómo cuándo y por qué (inconcluso), quedaron en proceso de edición al momento de su fallecimiento.
Poemas de Liliana Cadavid
Susurro
Caminarás por sobre la esperanza que te inventaste.
Habrá más lunas para anochecerse y para soñarse.
Vendrá de un beso la palabra grave que no has oído.
–Vendrá de un canto de palomas ciegas y de susurros–
Ponte la luna encima de las manos y ven a amarme.
Que antes que llegue el último verano ya me habré ido.
Por esa mujer que llevo dentro
Por esa mujer muerta que llevo dentro
me levanto despacio por la mañana
camino silenciosa con su sonrisa
y me engaño pensando que está durmiendo.
Por esa mujer muerta que llevo dentro
me abandono creyendo que estoy amando
me doy loca a la luna, me vuelvo lenta
por la mujer que guardo como un lamento.
Por esa mujer muerta que llevo dentro
siento al mundo cayendo sobre mi boca
siento mi vientre lleno de sinsabores
por la mujer deshecha que traigo dentro.
Por esa mujer muerta que está rompiendo
me he rendido a las plantas de la esperanza
he buscado en las copas y me he llenado
de recuerdos… De sueño y sabor a lágrimas.
Por esa mujer muerta que llevo dentro
esa que mira siempre como un fantasma
desde el fondo escondido de mi recuerdo
esa que me devora cuando me callo:
¡Por esa mujer muerta yo estoy viviendo!
Mimo
Mimo yo soy del juego que me trazo,
mimo y en mí la vida deja un rastro
de pintura fatal que me domina.
Mimo; en mi piel no cabe más tristeza;
trazo mortal fundió sobre mi rostro
la mueca de la vida.
Me fue pintando desde mucho antes
el dolor como único destino.
Hombre herido
El hombre inacabado no tiene nada.
Rastro fútil.
El hombre es sueño, nada más lo salva.
El hombre es sueño material.
Nada lo salva
ni siquiera el tiempo.
Su precioso metal de ausencia clama
y su brújula erró siglos atrás
por más estrellas y países largos.
Está herido.
Nada, ni la verdad lo forjará de nuevo,
porque el hombre,
/este estigma mortal tan desigual,
es sueño, nada lo salva.
El hombre tiene sed y mata el agua.
Su oscuro andar, su desazón no alcanza
ni siquiera a rozar la raíz de su espectro
porque el hombre se va.
El hombre calla.
Hombre mortal vacío hasta los astros.
¿Dónde paras?
Yo me salgo de mí
Yo me salgo de mí cuando me atrapa
con su melancolía alguna copa
y me pone a llorar y me aguitarra.
Yo me salgo de mí. Me vuelvo absurda
me vuelvo sombra-luna solitaria
me vuelvo música ilusión negrura
y pensamiento de mi angustia rara.
Yo me salgo de mí… Me vuelvo alba
me vuelvo oscuridad ebriedad basta
me vuelvo azul aureola misteriosa
y mi ser que se va conmigo calla.
Me voy a deshacer de mi pasado
Me voy a deshacer de mi pasado.
De mi lúgubre andar y de mi amor imaginario.
Voy a quitarme todas las imágenes.
–Todas las fantasías verticales–
Los nombres de las calles, los ladridos…
El hastío taladrándome la sangre.
Me coy a abandonar a los cristales
a los rostros difusos… A los ruidos… Al aire.
De ahora en adelante
De ahora en adelante me volveré más humo
Me volveré más sola… Me ataré sólo al viento.
De ahora en adelante seré más distraída…
No caeré en tu nombre y huiré de tu risa.
De ahora en adelante me volveré más lluvia…
Cubriré con mi boca tu sombra para siempre
me haré niebla los ojos y humo el corazón.
Si seguir valdrá algo
Cuando miro mis venas y la vida me incendia
como un bosque de piedra fugaz y melancólico.
Cuando miro que sigo caminando despacio
y que ya no hay caminos, se me crispan las manos.
Cuando escucho que sueño sin que el sueño sea algo
me da un temblor de miedo y un recuerdo de llanto…
Cuando miro mi cuerpo me contemplo en la tarde
Y me pregunto siempre si seguir valdrá algo.